La Organización de las Naciones Unidas (ONU) otorgó un reconocimiento destacado a la primera Conferencia Climática Internacional “Compromiso Latinoamericano hacia la COP30”, organizada por el Gobierno de Córdoba y la Municipalidad de Córdoba. El evento fue declarado oficialmente como “Evento Conmemorativo del 10° Aniversario del Acuerdo de París”, en virtud de su contribución a la acción climática y su proyección internacional.
La Conferencia, que se desarrollará entre el 1 y el 3 de julio en el Centro de Convenciones Córdoba, reunirá a representantes de gobiernos nacionales y subnacionales, referentes del sector privado, académico, científico y de organizaciones sociales de América Latina, con el objetivo de construir una agenda común frente al cambio climático y visibilizar las soluciones locales con impacto global.
Entre los aspectos valorados por la ONU para otorgar esta distinción se destaca la capacidad de convocatoria del evento, así como su enfoque en la ambición climática, con énfasis en obtener resultados tangibles en mitigación, adaptación y justicia climática. Esto se alinea directamente con los objetivos del Acuerdo de París, suscripto en 2015, que estableció metas globales para frenar el calentamiento del planeta y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Al respecto, la ministra de Ambiente y Economía Circular de Córdoba, Victoria Flores, celebró el anuncio y afirmó: “Es una gran noticia para todos los cordobeses, porque posiciona a nuestra provincia como un referente regional en el desarrollo de políticas ambientales activas y comprometidas con el futuro del planeta”.
Una década del Acuerdo de París
El Acuerdo de París fue adoptado en diciembre de 2015 durante la 21° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. En ese momento, 195 países del mundo se comprometieron a actuar de manera coordinada para limitar el aumento de la temperatura global a menos de 2 °C respecto de los niveles preindustriales, con el ideal de no superar los 1,5 °C.
Este tratado marcó un punto de inflexión en la diplomacia ambiental global y se basa en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), creada en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro en 1992. Su décimo aniversario se presenta como una oportunidad clave para profundizar la cooperación internacional y acelerar la transición hacia un modelo sostenible, resiliente e inclusivo.