Thales Alenia Space ha elegido Canarias como base para impulsar sus plataformas HAPS (pseudosatélites de gran altitud), con Fuerteventura como pieza clave para integrar y probar su Stratobus, un dirigible estratosférico capaz de mantenerse fijo durante meses.
José Antonio Álvarez de Arcaya, director de Relaciones Institucionales y Estrategia de la compañía en España, explica que la compañía ve en las islas un entorno idóneo por condiciones meteorológicas, espacio aéreo y respaldo institucional.
―¿Por qué eligieron expandirse a Canarias?
―Llevamos años desarrollando Stratobus, una plataforma que operará en la estratosfera (unos 20 km de altitud) para prestar servicios regionales de telecomunicaciones, navegación y observación de la Tierra, con aplicaciones civiles y también militares. Es un dirigible más ligero que el aire, con capacidad para permanecer en una posición fija y operar con autonomía en misiones de hasta un año, gracias a su propulsión exclusivamente eléctrica no contaminante. Concluimos que Canarias reúne las condiciones necesarias y cuenta con apoyo institucional para desarrollar el sector HAPS. Por eso colaboramos con el Parque Tecnológico de Fuerteventura y con las autoridades en los requisitos para estas plataformas. Además, lideramos el proyecto EuroHAPS, orientado a demostradores tecnológicos de HAPS más ligeros que el aire. En ese marco, seleccionamos el estratopuerto de Fuerteventura —el primero en Europa de este tipo— para integrar y probar prototipos a escala del Stratobus, con el objetivo de aportar soluciones también ante situaciones de emergencia identificadas por el Gobierno canario.
―¿Qué oportunidades presenta Canarias como hub empresarial?
―Canarias busca diversificar su economía y ha identificado los HAPS como un sector estratégico aún incipiente, pero con alto potencial. Plataformas como Stratobus pueden tener un papel relevante en ámbitos como vigilancia terrestre y marítima (pesca ilegal, piratería, tráfico de personas), protección de infraestructuras críticas, guerra electrónica, monitorización medioambiental (vertidos, incendios, calidad del aire y del agua) y la mejora de telecomunicaciones y navegación regionales.
―¿Podría compartir un caso específico de éxito gracias a estar en Canarias?
―Además de EuroHAPS, participamos en un proyecto pionero: el primer sistema geoestacionario de distribución de clave cuántica por satélite (GEO-QKD). Está financiado con Fondos Europeos de Recuperación a través del PERTE Aeroespacial y permitirá distribuir claves criptográficas de forma segura gracias a propiedades cuánticas de los fotones, algo clave para proteger comunicaciones críticas frente a la futura amenaza de la computación cuántica.
―¿Qué impacto ha tenido estar allí en crecimiento o proyección internacional?
―Estamos en una fase inicial, pero con expectativas sólidas. No se trata de una implantación oportunista, sino de un plan de negocio a largo plazo que genere riqueza en la región y para la empresa. Nuestra visión es consolidar una actividad que alcance varias decenas de millones de euros en negocio sostenido y que cree empleo de alto valor añadido.
