SANTIAGO, Chile.– Chile se mueve. El péndulo oscila. José Antonio Kast lidera con el 28%. Jeannette Jara baja al 26%. Evelyn Matthei sube al 16%. La derecha se reordena, la izquierda se fragmenta. La economía preocupa. La inseguridad también. El 64% está atento. El 89% promete votar. La encuesta Plaza Pública Cadem marca el pulso de una contienda que será feroz y hoy los chilenos conviven con una certeza: el reloj electoral no perdona.
La reconocida y muchas veces cuestionada encuesta, según el perdedor, se dio a conocer hoy y confirmó lo que ya parecía un pulso dinámico e inestable: José Antonio Kast, figura de la derecha dura, mantuvo el primer lugar, con un 28% de intención de voto para la primera vuelta presidencial. Por su parte, Jeannette Jara, la candidata oficialista, perdió cinco puntos y quedó en 26%. Evelyn Matthei, en tanto, recuperó terreno y regresó con fuerza al tercer puesto, escalando cinco puntos hasta el 16%.
Franco Parisi mantuvo el 12%, mientras que otros actores, como Johannes Kaiser, Marco Enríquez-Ominami, Harold Mayne-Nicholls y Eduardo Artés, obtuvieron porcentajes menores. Un 10% de la ciudadanía se mostró indeciso, expresó que no votaría o simplemente no supo a quién apoyar.
El escenario de una segunda vuelta mostró líneas claras: mientras Kast lideraba con comodidad frente a Jara (48% vs. 34%); Matthei también superaba a la oficialista (46% vs. 37%), y Parisi se mantenía competitivo con un 39% frente al 36% de Jara.
Solo Johannes Kaiser lograba una victoria marginal sobre Jara (41% vs. 35%). Para el oficialismo, estos números fueron una señal de alarma.
“Kast desarrolló una estrategia focalizada en las preocupaciones mayores de la ciudadanía (seguridad, empleo, crecimiento económico) y eso le rindió más a nivel particularmente de sectores populares”, dijo Claudio Fuentes, director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales de la Universidad Diego Portales, a LA NACION.
Sobre la caída de Jara, el académico fue claro. “Podría explicarse en parte por el hecho de ser comunista; pero quizás el principal freno es el apoyo al gobierno. El gobierno y Boric estaban obteniendo un 30%, que es similar a lo que recibe Jara. Hay una asociación muy estrecha con lo hecho por el gobierno”.
Por su parte, Ricardo Hernández, coordinador de Política y Sociedad de Res Pública, recordó el último encuentro de ambos candidatos en una reunión con salmoneros en el sur de Chile hace un par de semanas.
“José Antonio Kast fue consistente en su discurso, concentrando sus dardos en atacar el fenómeno de la delincuencia y la reactivación económica. Su buen desplante en los debates, así como la estrategia de anunciar propuestas semanalmente, puede explicar en parte el éxito en las encuestas en los últimos meses”, señaló.
Sobre Jara, fue enfático. “A las pocas semanas de ganar las primarias adquirió el mismo porcentaje de apoyo que obtiene el actual gobierno. Su militancia comunista junto con ser la candidata de la continuidad de un gobierno que no fue bien evaluado explica el descenso en estas últimas semanas”.
Hernández añadió que el contexto político chileno empujó hacia un gobierno “de emergencia”: “Las fuerzas que demostraron mayor convicción y gobernabilidad en lograr esos objetivos probablemente se quedarían con el sillón presidencial”.
Otro aspecto que destacan los analistas tiene que ver con lo que ocurre en La Moneda. “El presidente Gabriel Boric ha mantenido un 35% de aprobación y un 62% de desaprobación, niveles que no le han permitido impulsar con fuerza a la candidata oficialista”, dijo un parlamentario de centroizquierda que pidió no ser mencionado.
Por ello, ha ido quedando claro que la fatiga con la política tradicional y la inseguridad han influido durante la campaña. De hecho, el 89% de los consultados aseguraron que votarían, mientras que el 64% dijo estar muy interesado en la elección. En ese escenario, la movilización ciudadana, más que la adhesión, ha sido clave.
En medio de la creciente tensión electoral, José Antonio Kast no dejó pasar la oportunidad para emplazar directamente a Jeannette Jara. El candidato republicano la llamó a “disculparse” por “haber mentido” sobre su programa de primarias y por haberlo “agredido” durante un debate público. Kast se refería al episodio en que Jara negó que en su programa se planteara la nacionalización del cobre y del litio, afirmación que el propio oficialismo terminó reconociendo como un error.
“Si tenemos alguna duda o creemos que algo de lo que dijo Jeannette Jara puede generar incertidumbre como lo fue el tema de plantear en su programa de primarias el nacionalizar el cobre y el litio, tenemos que decirlo, porque eso sí afecta el desarrollo del país; las inversiones están mirando qué plantean los distintos candidatos”, apuntó.