Llega a la entrevista algo demorada y pide disculpas. Ya maquillada para las fotos, con un look Total Pink muy descontracturado y la espontaneidad que siempre la acompaña, Juana Viale le pregunta al fotógrafo: “¿Dónde me pongo?”. Acepta cada una de las sugerencias, menos posar sobre uno de los sillones. “No, ahí no me gusta”, dice sin dar más detalles. Su presencia en esta coqueta productora de Palermo combina con un día que pinta primaveral, luego de tantos cielos nublados.
La charla con Clarín es en una de las oficinas con jazz ambiental de fondo, mientras la nieta de Mirtha Legrand devora una banana (estaba sin desayunar). “¿Te molesta que coma?”, pregunta respetuosa y sigue disfrutando de la fruta.
El “acelere” que exhibe en su programa Almorzando con Juana (El Trece) cuando muestra su outfit y presenta a sus invitados contrasta con esta mujer de 42 años que luce reflexiva y pausada.
A partir de este domingo 22 de septiembre, en el Teatro Regio, protagonizará Juana, una coproducción entre Club Media y el Complejo Teatral de Buenos Aires, dependiente del Ministerio de Cultura de la Ciudad (las funciones serán de jueves a sábados a las 20 y los domingos a las 19). La obra, que dura 80 minutos, es una creación de Chevi Muraday, prestigioso bailarín y coreógrafo español.
“Es un gran desafío. En mi trayectoria teatral no he hecho nada semejante, porque incluye mucha danza. Tengo cuatro compañeros que son unos bailarines deslumbrantes. Implica un compromiso físico, distinto al que estoy acostumbrada. Es un proyecto diferente, exigente, muy sensible. Se trata de una obra conceptual, muy interesante”, dice entusiasmada sobre la obra.
Muraday es responsable de la idea original, la coreografía y la dirección. Los textos pertenecen a Juan Carlos Rubio, Marina Seresesky y Clarice Lispector. Sobre el escenario, a Juana Viale la acompañarán los bailarines Nicolás Baroni, Rodrigo Bonaventura, Emiliano Pi Alvarez y Andrés Rosso.
Total rosa. El look elegido por Juana Viale para la entrevista con Clarín. Foto: Ariel Grinberg
21 años como actriz
Juana Viale comenzó su carrera como actriz en 2003, cuando Marcelo Tinelli la convenció para hacer de villana en la segunda etapa de la tira televisiva Costumbres argentinas. De ahí en más, expandió su labor como intérprete también al cine y al teatro. Hay, en ese recorrido, un hito particular: su participación en dos capítulos de La Dueña, miniserie protagonizada por su abuela Mirtha Legrand, a quien reemplazaría años después en su clásica mesa televisiva durante la pandemia, para quedarse finalmente con la emisión de los domingos.
La conductora y actriz explica cómo surgió la idea de protagonizar Juana: “No me la propuso nadie, la elegí yo. Un amigo me dijo: ‘Che, fijate esta obra, es española’. No sabía ni de qué se trataba y empecé a interiorizarme. Enseguida dije: ‘¡La quiero hacer!’. Así que me reuní con José Massa (hijo del emblemático fotógrafo de artistas Antonio José Massa), un gran amigo con quien siempre quise trabajar y nunca habíamos hecho nada. Le dije que tenía este proyecto y empezamos a producirlo”.
Con bellas y contundentes afirmaciones, Chevi Muraday dice sobre la obra Juana: “Al atravesar los bosques de la memoria encontramos a una mujer, a muchas mujeres, unidas por un mismo nombre, que se preguntan incesantemente si hay un destino femenino en la Tierra”. Y se refiere a distintas Juanas de la historia (Juana la Loca, Juana de Arco, la Papisa Juana, Sor Juana Inés de la Cruz, Juana Azurduy o Juana Doña).
-Además de lo obvio, que vos también te llamás Juana, ¿qué te identifica de esta obra y la naturaleza de esas mujeres?
-De la obra me interesó la forma del relato. Sobre Juana de Arco yo ya sabía bastante, también sobre Juana Azurduy y Sor Juana Inés de la Cruz. Pero la propuesta no es ir a ver una obra de teatro para que te cuenten las historias de ellas que están en los libros, para eso recomiendo que mejor vayan a una librería o a una biblioteca. La obra es muy poética, está representada con el cuerpo y con la palabra, y con una música alucinante que te transporta (a cargo de Mariano Marín).
La Juana Viale que habla está completamente sumergida en su “versión actriz”, un rol que comparte con tantos otros de su vida. Manifiesta muchísimo entusiasmo por su nuevo proyecto teatral y enseguida se nota que el espíritu de las mujeres a las que se alude en el texto la inspiran.
“A medida que vas haciendo la obra, y más vas diciendo los textos, y más los vas sintiendo y atravesando, es como que resurgen nuevos significados”, agrega.
Juana Viale, pese a su declarada timidez, dice haber encontrado su voz como conductora televisiva. Foto: Ariel Grinberg-¿Qué te llama la atención de la vida de esas diferentes Juanas de la historia?
-Por ejemplo, que algunas, como Juana de Arco o la Papisa Juana, tuvieron que hacer de hombres para poder ser. Me preguntaba qué difícil es tener una voluntad, un deseo tan poderoso y deber disfrazarlo. Y después hay otras Juanas, como Sor Juana Inés de la Cruz, que se enamoró y fue condenada por eso. O Juana Azurduy, una militante aborigen que hablaba quechua, que liberó su cultura. Esta es una era en donde las mujeres luchamos y tenemos muchos derechos ganados, pero aquellas fueron las que levantaron esas banderas hace muchísimos años.
-¿Qué otra Juana te conmueve?
-Pienso en Juana de Arco. Más allá de si era una santa o si escuchaba voces, ella tenía 14 años… ¡Había que llevar un escudo y una espada a esa edad, y dar esas batallas! Después estuvo dos años detenida y la torturaron para que confesara. Son mundos que, cuanto más vas conociendo, más querés saber. Y en esta obra se expone la pasión, el amor, la voluntad, el deseo, que tenían estas mujeres tan poderosas.
Una Juana, todas las Juanas
Que se llame Juana, como aquellas mujeres tan valientes de la historia, no cree que sea fruto del azar. “Siento mucha admiración por ellas, pero no por haber marcado una bisagra en el desarrollo histórico, sino como mujeres. En la obra, además, hay un personaje que se llama la Mujer Contenedora, que es la que contiene a todas esas mujeres históricas. Se trata de una mujer contemporánea y contenedora, que heredó esas cualidades. Y que yo me llame Juana no creo que sea una casualidad. Pienso que también hay algo de todas esas Juanas en mí.”
Juana Viale ya lleva 21 años como actriz. Marcelo Tinelli fue quien la convenció para ser parte de la tira «Costumbres argentinas». Foto: Ariel Grinberg-¿Te autopercibís tan valiente y capaz de realizar grandes gestas?
-No me gustan las etiquetas, pero sí entiendo que yo tengo algo de eso en mi naturaleza. Comprendo la pulsión de aquellas Juanas históricas. Me pregunto qué hubiese sido de mí en esas épocas, qué hubiese sido yo. Son preguntas contrafácticas, pero me pregunto si hubiese tenido ese valor. ¿Me hubiese animado, lo hubiese hecho? Las de esas mujeres son almas realmente muy profundas.
-Hoy tenés un alto nivel de popularidad a través de la conducción en TV, que te permitió llegar a un público más diverso. ¿Sos consciente de que mucha gente a lo mejor va al teatro a “encontrarse” con la Juana de los almuerzos de la televisión?
-Para empezar, es una obra de teatro y estoy interpretando varios personajes históricos, emblemáticos, bellos, auténticos… Ojalá no vieran a la Juana que ven en la tele, porque si no sería un pésimo trabajo actoral el que estoy realizando (risas). Pero igualmente está buenísimo que la gente pueda acercarse al teatro. porque ya me conoce de la tele y me quiere ver.
-Como actriz, ¿tenés referentes, actrices o actores que admirás? ¿Cuál es tu método a la hora de componer personajes?
-Hay muchas películas que destaco por cómo actúan ciertas actrices, por eso me gusta tomarlas de referencia. Y después creo que el punto más precioso de la actuación es la observación del mundo real. Es poder ver a la gente en un bar, en un restaurante, en la calle, en la florería, en el quiosco, en la estación… Donde sea.
Del “aguante” al estilo propio
Juana Viale se animará a bailar en «Juana», la obra que estrena en el Teatro Regio. Foto: Ariel GrinbergConfiesa que “las horas de vuelo” que adquirió conduciendo Almorzando con Juana la transformaron en una nueva versión de sí misma. Y cuenta en qué la ayuda su experiencia de actriz a la hora de ponerse frente a las cámaras para recibir a sus invitados:
“En la vida, lo más interesante es alimentarse de todo lo que uno hace, sacarle el nutriente. No encarar las cosas superficialmente. Me parece que todo es una gran construcción. En estos últimos años, la conducción, por cómo se dieron las cosas, me enseñó muchísimo. Ha modificado mi personalidad, mi ser, mis creencias. También he reafirmado otras cosas que yo pensaba. Pero entiendo que la conducción no deja de ser una… (duda). No quiero decir una actuación. Pero la conductora de la tele no termina de ser la Juana que está en mi casa. No sé cómo decirlo”.
-La Juana que nadie conoce.
-La que nadie conoce no, la que conocen otros. La Juana que no está tan expuesta ni debe mantener “una conducta” determinada.
Juana Viale es madre de tres hijos y dice que tiene muy buena comunicación con ellos. Foto: Ariel Grinberg -Por entrevistar a tantas personalidades, ¿se acentuó en vos el compromiso social y político? Algo que a veces queda en evidencia cuando expresás más abiertamente tus posturas frente a diferentes temas.
-Yo no sé si doy tanto mi opinión en el programa, es un lugar donde se escucha mucho, donde se comparte realidad, puntos de vista. Hay cosas que son innegables, pero no es que esté más o menos comprometida. A lo mejor es porque estoy en un programa en el que hay más actualidad.
-Lo que empezó como una suplencia o un “hacerle el aguante” a tu abuela, terminó siendo un rol de conductora con impronta propia. ¿Aún así sentís que seguís honrando el legado de Mirtha Legrand?
-Arrancó como una suplencia, pero yo me reconozco una persona comprometida con lo que hago. La forma en que conduzco a uno le puede gustar más y a otro menos, pero no dejo de tener ese compromiso conmigo. Si lo voy a hacer, intentaré hacerlo lo mejor posible.
-¿Nunca te pesó?
-No, porque fue un momento de mucha inconsciencia por cómo se dieron las cosas. A lo mejor, si no hubiese sucedido lo de la pandemia y me hubieran propuesto hacer el programa de almuerzos de mi abuela, creo que habría dicho que no. Lo que sucedía en aquella época con el Covid fue un signo de interrogación incluso para la Humanidad.
-Con el correr de los programas impusiste tu estilo, bien diferente al de Mirtha.
-Sí, sí, hay un montón de gente que ahora mira el programa porque lo conduzco yo. Soy muy tímida y muchas veces me cuesta vincularme con el mundo exterior, por eso estoy muy agradecida por lo que está sucediendo.
Su rol de madre
La Juana madraza es otro de los roles que Viale enarbola como una verdadera cruzada. Con el músico Juan de Benedictis, hijo del cantante Piero, tuvo a Ámbar (21). Fruto del amor con el actor chileno Gonzalo Valenzuela nacieron Silvestre (16) y Alí (12).
Juana Viale y su novio Yago Lange cruzaron el Océano Atlántico en velero.-¿Cómo es la Juana madre de adolescentes? ¿Sos permisiva? Por la edad, ¿tus hijos son rebeldes, como a lo mejor lo fuiste vos con tus padres?
-¡¿Tu pregunta hace referencia a que mis hijos son rebeldes?! (risas). Si yo fui libre cuando era adolescente fue porque mis padres me dieron la libertad para serlo. Y yo con mis hijos tengo mucha comunicación y diálogo, que es la base de todo. Para mí, la rebeldía significa hacer lo que realmente deseás.
-Como a Juana de Arco, muchas veces, metafóricamente hablando, te han querido “quemar en una hoguera”. Con polémicas, críticas, haters, cancelaciones…
-Si hablamos de fuegos, más que de condenas y hogueras, creo que es muy interesante poder desarrollar el concepto de fuego interior. Es el calor, la pulsión que te mantiene vivo. Y sí, es cierto que he superado un montón de cosas en un mundo en el que es más fácil hablar mal que bien; o criticar para destruir que para enarbolar; donde se suele insultar más que decir una palabra de amor. Estuve en ese lugar muchísimas veces. Pero siempre me aferré a mi familia, mis hijos, mis amigos, a mi ser. La verdadera historia la conozco yo, entonces no puedo estar escuchando ni dándole constantemente entidad a lo oscuro.
Amor aventurero y reservado
Para muchos, Juana Viale es una “loca linda”, transgresora, una mujer a la que le gusta militar por sus convicciones y desafiar modelos impuestos. Actualmente está en pareja con Yago Lange (35), ex regatista olímpico (pasión que heredó de su padre, el reconocido medallista olímpico Santiago Lange).
Se trata de un experto en temas ambientales, sobre todo en lo que se refiere al cuidado de las aguas del planeta. Juana viene de vivir una hermosa y arriesgada aventura con él, al atravesar el océano Atlántico en un velero por una causa ecológica.
Juana Viale y Yago Lange. Ella dice estar bien en el amor, pero no habla de eso. Foto: Instagram“El barco se transforma en tu propio planeta; se trata de aprender a convivir allí”, explicó Yago, que destacó que con Juana comparten la importancia del cuidado ambiental. “Juana es muy mediática y ella usa su voz para hablar sobre estos temas; le encanta navegar y ya sumó muchas millas, está aprendiendo un montón”, agregó.
Siempre reservada a la hora de hablar de sus relaciones amorosas, Juana Viale evitó referirse a su romance con Lange. “No me gusta hablar de esas cosas”, dice. Pero desliza: “En el amor estoy muy bien. Soy una mujer muy apasionada, destaco la constancia y la consistencia con que hago todo. Amo ser madre, amo mi trabajo, con eso me alimento mucho”.
-¿Por qué creés que la gente, sobre todo la que te ve cada domingo en Almorzando con Juana, puede disfrutar de tu obra de teatro?
–No sé si alguna vez tuve el cariño que tengo ahora de la gente. Noto que con la tele hay una Juana que se popularizó, y por eso estoy súper, súper, agradecida. Es enorme el afecto que recibo. Juana es una obra diferente, conceptual. Ojalá que el público que asista al teatro y la vea, sienta que el tiempo se le pasó sin que se diera cuenta. Hay algo residual que la obra dejará en cada uno que la vea. Todos hallarán algunas preguntas y algunas respuestas. Sólo hay que experimentarlo.
-¿Cuáles de las Juanas reflejan mejor tu forma de ser? ¿La de los almuerzos, la que se sube al escenario, la madre, la mujer?
-No sé si soy sólo una Juana. Creo que soy un montón de Juanas, como todos los roles que nombraste y otros que la gente no conoce. Lo que se repite en cada una de esas facetas es lo auténtico. Lo que soy en mi esencia.