Luego de que el presidente electo Javier Milei planteara la posibilidad de «entregar Aerolíneas Argentinas a sus empleados» y de desarrollar una política de cielos abiertos, el principal sindicalista aeronáutico salió duramente al cruce: dijo que para cumplir con su plan, el libertario tendrá que «carga muertos» a los trabajadores de la compañía.
«Si se quiera cargar Aerolíneas, nos va a tener que matar. Y cuando digo matar, literalmente; nos va a tener que cargar muertos. Que me anote primero«, afirmó Pablo Biró, titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas, en una entrevista con Radio Nacional Rock.
«Si nos quiere meter en cana y abolir el derecho de huelga, detenernos, perseguirnos y gobernar por decreto… será Fujimori, la historia lo juzgará y terminará en cana«, agregó luego en una comparación con el expresidente peruano, quien fue condenado a 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad.
Las palabras de Biró -al frente del gremio que agrupa a 1.800 afiliados- se dan luego de que el líder de La Libertad Avanza planteara en una entrevista radial su plan para que la compañía pase a manos de los trabajadores, lo que en la práctica representaría que dejaría de recibir subsidios del Estado.
«Nuestra idea es entregársela a los empleados y que ellos mismos hagan la depuración y comiencen a competir en una política de cielos abiertos», había dicho Milei en declaraciones a Radio Rivadavia. También aseguró que «el personal de Aerolíneas es un personal muy calificado, el problema radica en la contaminación política».
Aerolíneas Argentina viene cediendo participación del mercado aéreo de cabotaje a otros competidores desde hace ocho años, tanto durante el gobierno de Macri como el actual. La declaración de Milei apuntó principalmente contra los gremios aeronáuticos, que manejan los resortes de la línea aérea estatal tanto desde afuera como desde adentro.
Lo que Milei ahora promete es que el Estado trasladará a los gremios la responsabilidad de transformar Aerolíneas Argentinas en una empresa rentable, lo cual no ha sido posible prácticamente nunca en toda su historia.
Pablo Biró, titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas.Sobre este punto, y tras la dura advertencia inicial, Biró afirmó: «Si hay mesa de diálogo, y quieren discutir, tenemos argumentos para discutir. Los trabajadores ya demostramos que una compañía pública generar riqueza». Y planteó que, si le quitan impuestos, «Aerolíneas sería superavitaria de inmediato. Aporta de manera impositiva más del doble de lo que el Estado pone para su funcionamiento».
«Cuando desembarquen y auditen Aerolíneas se van a encontrar que es una compañía súper profesional, con personal técnico muy calificado, con estándares de los más altos del mundo. Siempre pasa lo mismo, cuando desembarcan se sorprenden gratamente y esto es lo que va a suceder. Cuando se conoce Aerolíneas por dentro, no tiene nada que ver con los prejuicios y la mala propaganda que se hace por el uso politico», afirmó.
A su vez ,el sindicalista apuntó a la gestión del oficialismo durante los últimos años. “Milei está donde está es porque tuvimos un Gobierno donde el presidente y la vicepresidenta no se hablaron durante 3 años”, afirmó.
Los números de Aerolíneas
Aerolíneas Argentinas es una empresa con más de un récord en contra. El más obvio es su déficit crónico, por el cual desde su reestatización en julio de 2008 recibió el equivalente a más de 8.000 millones de dólares que fueron destinados casi exclusivamente a cubrir sus pérdidas operativas.
Muy poco de ese dinero fue destinado a inversiones como flota, de la cual Aerolíneas es propietaria sólo de unos 30 de sus 80 aviones, que a su vez son los que tienen menor valuación (los Embraer 190 y dos Boeing 737-700).
Pero actualmente los subsidios que recibe Aerolíneas son menos cuantiosos. Este año sus pérdidas rondarían los 200 millones de dólares, que es una cifra importante pero inferior a los 700 millones de dólares que le pidió al Estado en 2020, o el promedio de más de 600 millones de dólares anuales en subsidios que recibió durante los años posteriores a 2008.
Los gremios manejan gerencias completas dentro de Aerolíneas y a la vez condicionan a la empresa desde afuera, con medidas de fuerza que van desde los paros que le hicieron al gobierno de Macri (donde llegó a haber una medida de fuerza cada 15 días) hasta el formato más disimulado de «asambleas» que llevaron adelante sobre todo durante los gobiernos K.