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17 noviembre, 2024

Télam: el Gobierno asciende al interventor y reabre la agencia como una nueva empresa publicitaria

El interventor de los medios públicos, Diego Chaher, fue ascendido por el Gobierno, que lo designó nuevo secretario de Empresas y Sociedades del Estado, dependiente de Jefatura de Gabinete, para profundizar el ajuste en el Correo, Aerolíneas Argentinas, la TV Pública, Radio Nacional, Télam y todas las demás empresas públicas del gobierno nacional.

Asumió Chaher en reemplazo de Mauricio González Botto, según el Decreto 549/24 publicado este lunes en el Boletín Oficial.

Y un hombre de Chaher, Eduardo González, quedaría en su lugar como interventor de Télam, Radio y Televisión Argentina (Radio Nacional y la TV Pública), Educ.ar y Contenidos Públicos (Pakapaka, Encuentro y DeporTV), luego de que el Senado quitó de la Ley Bases a RTA de las empresas a privatizar.

La gestión de Diego Chaher como interventor de los medios públicos logró resultados muy valorados por el presidente Javier Milei, «cumplió con el mandato que se le dio», dijeron fuentes del Gobierno a Clarín, ya que logró reestructurar la agencia Télam, sin grandes conflictos en la calle -como tuvo el gobierno de Mauricio Macri cuando despidió a 354 empleados-, además de reducir fuertemente la plantilla laboral y ajustar los gastos en todos los medios públicos, aunque todavía pretenden profundizar ese ajuste para ponerlos en sintonía con el objetivo global del déficit cero.

El nuevo secretario de Empresas Públicas llega con el objetivo de «profundizar» el ajuste en los medios públicos y en las 33 empresas estatales (sin contabilizar a las financieras), que tenían 110.000 empleados y un déficit operativo de $1,6 billón en 2023.

Es que entre enero y abril pasado el gobierno redujo 3.400 empleados en las empresas públicas, de los cuales Aerolíneas Argentinas aportó «sólo 316», explicó un funcionario libertario del sector, en base a datos del último informe de dotación de la administración pública que difundió el INDEC.

El Gobierno pretende profundizar los despidos en todas las empresas estatales, como se viene haciendo en los medios públicos, donde en medio año se desvinculó a un tercio de los empleados, en una combinación de retiros voluntarios, despidos, reestructuración organizativa y no renovación de contratos que fueron venciendo en estos últimos meses.

La conversión de Télam en APE

Tal como adelantó Clarín, el gobierno reabrirá el área publicitaria de Télam, bajo el nombre de Agencia de Publicidad del Estado (APE), según el Decreto publicado este lunes en el Boletín Oficial, que lleva las firmas del presidente Javier Milei y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

La nueva empresa APE será una Sociedad Anónima Unipersonal y tendrá alrededor de 100 empleados, que trabajarán en la sede porteña de Télam de Bolívar 531. Ese edificio está vallado desde marzo pasado, pero las autoridades pretenden reabrirlo en los próximos días.

En simultáneo, unos 100 periodistas de Télam serán reubicados para trabajar en los noticieros, portales y redes sociales de los medios públicos. Por ejemplo, para consolidar el área digital de Radio y Televisión Argentina (RTA), la empresa que maneja Radio Nacional y la TV Pública, cuya nueva estética y línea editorial que se lanzó hace tres semanas fue muy celebrada por el director de Contenidos Digitales del gobierno, Juan Pablo Carreira, alias Juan Doe en redes sociales.

En un primer momento, la nueva empresa APE se ocupará de pagar la deuda de publicidad oficial que quedó pendiente del gobierno de Alberto Fernández. Pero también podría centralizar la publicidad que actualmente cursan los organismos públicos descentralizados y algunas de las empresas estatales, así como volver a distribuir avisos del gobierno nacional, una vez que venza la suspensión del primero año que anunció el presidente Milei.

“Dispónese la transformación de Télam Sociedad del Estado en Sociedad Anónima Unipersonal, bajo la denominación de Agencia de Publicidad del Estado Sociedad Anónima Unipersonal (APE S.A.U.) en la órbita de la Jefatura de Gabinete de Ministros”, destaca el primer artículo del Decreto 548/24, que se publicó este lunes en el Boletín Oficial.

Si bien el plan del Gobierno es reabrir uno de los edificios de Télam para que alrededor de 100 empleados hagan las mismas tareas de agencia publicitaria que hacían antes del cierre de Télam, fuentes oficiales insistieron con que «la reapertura de Télam no es tal. El Estado está obligado a tener una agencia de publicidad para cursar pauta a los medios. Télam no se reabre. Se va a usar una parte de su estructura para crear esa agencia. Entiendo que con 80 empleados», dijo una fuente cercana al vocero presidencial Manuel Adorni.

De hecho, Adorni posteó en sus redes sociales el sábado pasado: «Télam tal como la conocimos ha dejado de existir».

Es que Télam funcionó hasta marzo pasado como un mayorista de noticias, que difundía 500 notas (cables) por día a más de 800 medios de comunicación a los que les prestaba servicio, junto con unas 200 fotos diarias de los más diversos acontecimientos, desde un partido de fútbol hasta la apertura de sesiones ordinarias del Congreso que realizó Milei. Eso ya no existe más.

Pero además, Télam era la encargada de implementar, controlar, facturar y pagar la publicidad oficial del Gobierno nacional, hasta que Milei decidió primero suspender la pauta oficial por un año y luego cerrar la agencia estatal. Esta será el área que se reactivará, bajo la nueva empresa APE.

Del cierre, a la reapertura parcial

El Presidente Milei anunció el cierre de la agencia Télam el viernes 1 de marzo, cuando dio el discurso de apertura de las sesiones ordinarias en el Congreso.

«Vamos a cerrar la agencia Télam, que ha sido utilizada en las últimas décadas como agencia de propaganda kirchnerista», dijo el Presidente ese viernes por la noche en el Congreso.

Tres días después la agencia dejó de funcionar, se dio de baja su sitio web, las dos sedes porteñas de la agencia amanecieron valladas, y sus empleados fueron «dispensados» de ir a trabajar.

Desde entonces, hubo un Plan de Retiros Voluntarios, que tuvo la adhesión de 370 empleados, la mitad de la plantilla laboral. Además, habían intimado a todos los empleados de Télam a devolver las notebooks, cámaras fotográficas, filmadoras, drones y otros dispositivos que les fueron asignados para realizar sus tareas periodísticas.

Diego Chaher, interventor de Télam, le había solicitado a fines de mayo a la Secretaría de Trabajo que le dé “trámite prioritario y urgente” al pedido de aplicar el Procedimiento Preventivo de Crisis, para “habilitar en forma inmediata” los despidos del resto del personal.

Pero el gobierno demoró esa medida, en simultáneo con el reemplazo de Nicolás Posee por Guillermo Francos en la Jefatura de Gabinete, junto con el ascenso de Chaher como secretario de Empresas del Estado, en reemplazo de Mauricio González Botto. Mientras la negociación con los bloques «dialoguistas» de la oposición en el Senado, por la Ley Bases, forzó el retiro de la TV Pública y Radio Nacional de las empresas a ser privatizadas por el gobierno, medida que fue luego ratificada por la Cámara de Diputados.

A diferencia de los «inminentes despidos» en Télam que anunciaba el gobierno en los últimos meses, ahora se profundizó el canal de diálogo con los empleados y los gremios para reabrir el área publicitaria y reubicar en otros medios públicos a una parte de los periodistas de Télam que no aceptaron el retiro voluntario.

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