A un 50 por ciento de los argentinos no le importaría que asuma un gobierno no democrático y el 72 por ciento no está satisfecho con los resultados económicos y sociales de la democracia reestablecida hace 40 años atrás, según una encuesta de cultura constitucional.
La encuesta se conoce a 48 horas de las elecciones presidenciales del domingo en las cuales el candidato de Libertad Avanza Javier Milei podría expresar esa insatisfacción de la población con la democracia.
Los resultados de esa encuesta fueron presentados en el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires por parte de Eduardo Fidanza, el profesor de Derecho Constitucional Daniel Zovatto, el constitucionalista Antonio María Hernández, con la coordinación del Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Austral Manuel Garcia Mansilla.
Hernández, ex convencional constituyente, comentó que este preocupante resultado es consecuencia de la “anomia” que sufre la Argentina desde hace años, tal como la calificó Carlos Nino en su clásico libro “Un país al margen de la ley”. El constitucionalista también manifestó su preocupación por la baja confianza de la población en la Justicia y la relacionó con los ataques que sufre desde el kirchnerismo.
La encuesta fue realizada por la consultora Poliarquía de Fidanza, con el respaldo de la Universidad Austral e Idea Internacional. El estudio se realizó entre fines de septiembre y principios de octubre de este año sobre 1.000 personas residentes en grandes centros urbanos, a través de encuestas telefónicas.
Se trata de la tercera edición de la encuesta, que ya se realizó en 2004 y 2014. Su realización fue adelantada por los 170 años de la sanción de la Constitución Nacional de 1853, y los 40 años de la recuperación democrática.
“La luz amarilla más peligrosa y más preocupante es que el 50% de los argentinos dice que no le importaría que llegue al gobierno un régimen no democrático, siempre y cuando dé resultados”, advirtió el especialista Zovatto.
Luego observó que “hay una alarma importante de un sector considerable de la ciudadanía dispuesto a sacrificar partes de su democracia y de su libertad” a cambio de esos resultados, vinculados a la salud, la educación, el trabajo o la seguridad, entre otros aspectos.
La encuesta muestra que un 73% de los encuestados considera que “la democracia es preferible a cualquier otra forma de gobierno”, mientras que un 23% cree que “en algunas circunstancias, un gobierno no democrático puede ser mejor”.
Por otra parte, reveló un apoyo al discurso de “mano dura” contra los delincuentes. Un 45% de los encuestados está “de acuerdo” o “muy de acuerdo” en que una persona presa por homicidio reciba la pena de muerte. Se acentúa en los jóvenes: un 65% de las personas de entre 18 y 29 años opina que es peor para una sociedad “dejar libre a un culpable” que “encarcelar a un inocente”.
En otro aspecto, la encuesta muestra que el nivel de personas que creen que la Constitución Nacional bajó del 91% en 2014 al 83% este año. En ese mismo período, quienes creen que la Carta Magna no se cumple pasaron del 69% al 78%. Y más de la mitad atribuye esta violación al mal funcionamiento del Poder Judicial. Además, aumentó 10 puntos la cantidad de argentinos que cree que en el país no hay igualdad ante la ley.
Entre las instituciones con mayores niveles de confianza figuran las universidades públicas seguidas por las Fuerzas Armadas y las fuerzas de seguridad. Los empresarios, los partidos políticos y los sindicatos aparecen al final de la lista.
La mirada negativa también recae sobre el Congreso: el 87% dice que no toma decisiones “pensando en la gente”; casi dos de cada tres sienten desinterés por los temas que se discuten; y un tercio cree que se podrían desobedecer las leyes sancionadas por el Congreso. Más de la mitad atribuye esta situación al mal funcionamiento del Poder Judicial.