El delantero fue clave en el 3-3 ante Central y su actuación provoca dudas sobre cómo plantar al equipo, a una semana de los octavos de final de la Copa Libertadores.
Pablo Solari la rompió ante Rosario Central y lo metió a Martín Demichelis en una disyuntiva: seguir con los cinco volantes o modificar el esquema para que el delantero de 22 años sea titular. Ese será el análisis que hará esta semana el entrenador de cara a los duelos de octavos de final de la Copa Libertadores ante Inter de Porto Alegre, que se jugarán el martes 1 y 8 de agosto.
El asunto es el siguiente: si Demichelis pone a Solari como titular, debe sacar a uno de los mediocampistas. Y eso es lo que desvela a ‘Micho’, dado que con los cinco volantes reconstruyó el equipo tras la derrota con Arsenal, lo que fue vital para hilvanar una importante cantidad de triunfos que lo encaminaron al título en la Liga Profesional. Pero, ¿quién sale? Esa es la cuestión.
Rodrigo Aliendro y Nicolás De La Cruz son los motores de la mitad de la cancha. No están para salir. Esequiel Barco, tampoco, ya que es el jugador más desequilibrante. Entonces, la mirada se posa sobre alguno de los históricos: Enzo Pérez y Nacho Fernández, fundamentalmente en el capitán.
Ante este panorama, en el que se encuentra difícil sacar a un volante: ¿qué se hace con Solari?. En principio, la idea de Demichelis es mantenerlo como primer recambio. Que sea el jugador revulsivo para los segundos tiempos, en caso de que River tenga que ir en la búsqueda de un resultado.
Aunque, también hay algo para analizar en ese caso. Los mejores partidos de Solari fueron como titular. Alcanza con repasar los ejemplos de las victorias a Fluminense en el Monumental por la Copa Libertadores y los triunfos sobre Defensa y Justicia, Banfield e Instituto en la Liga Profesional. No así cuando le tocó entrar en los últimos encuentros en los segundos tiempos, contra Barracas Central y San Lorenzo por el torneo local y ante Talleres por la Copa Argentina.
A su vez, sobre lo que le pide Demichelis, comentó: “Martín me pide que sea versátil, que esté en movimiento todo el tiempo. Que cuando juegue cerca del “9”, tanto con Lucas (Beltrán), Miguel (Borja) o Salomón (Rondón), que esté cerca de ellos, que haga diagonales. Uno se brinda para dar lo mejor para el equipo”.
La actuación ante Central, con dos goles y una asistencia, no solo lo puso a Solari en consideración de una posible titularidad en River, sino que también confirma los motivos por los que –según pudo saber este diario- el cuerpo técnico de la Selección lo tiene en la mira y le está haciendo un seguimiento.
A su vez, los dos gritos y la asistencia en el Gigante de Arroyito le sirvieron para transformar a este año en el mejor de su carrera: con 15 participaciones directas en las concreciones (6 goles y 9 asistencias), superó por tres lo hecho en Colo-Colo entre la segunda mitad del 2020 (cuando volvió el fútbol post cuarentena por la pandemia de coronavirus) y la primera del 2021 (8 tantos y 4 pases-gol), incluso con seis encuentros menos.
Estos números son el respaldo estadístico de lo que refleja Solari adentro de la cancha. Y que de a poco se va transformando en un jugador importante para River, con su velocidad, sus asistencias y sus goles. Ya sea como titular, o entrando en el segundo tiempo. Como punto o como extremo. Por derecha (más aún) o por izquierda. Abierto o más cerrado. Y así, le mete una linda presión a Demichelis.