La reciente realización del concierto “Tributo a Morricone” en el Auditorio de Belgrano, con la participación del trompetista Nello Salzar, marcó un momento relevante para el Ensamble de la Fundación Prometheus Argentina, conjunto dirigido por el maestro Giovanni Panella.
“Con el fin de acercar la música entre lo popular y lo académico, buscamos un compositor como Morricone que es, al mismo tiempo, simple y perfecto. Es una manera de entrar en el espíritu humano y llegar a la mayor cantidad de gente”, señala Augusto Bovio, titular de dicha Fundación, cuyo objetivo es “acercar la música académica al público”.
“La música es una experiencia no una ciencia”, había afirmado Morricone, aquel compositor de las bandas sonoras de más de 500 películas y series. Y la presencia de Salzar –trompetista en muchas de aquellas composiciones, incluyendo la de Cinema Paradiso- contribuyó al suceso en el Auditorio porteño, en un programa que también abarcó la música de las películas clásicas de Sergio Leone. Aquella noche también se escuchó la música de “El Cartero” (Luis Bacalov) y el Libertango, de Piazzolla.
Realizaron -y mantienen- conciertos gratuitos en distintos lugares emblemáticos de Buenos Aires, desde iglesias hasta el Rosedal y las escalinatas de Facultad de Derecho, abarcando múltiples obras. Por ejemplo, en la iglesia Nuestra Señora de las Mercedes, en Belgrano, ofrecieron la “Missa Papae Marcelli” de Palestrina y otras obras de la Escuela Romana.
El trompetista Nello Salzar se presentó con el Ensamble de la Fundación Prometheus Argentina en el Tributo a MorriconeOtro hito fue la realización del Concierto por la Paz, en vísperas de la pasada Navidad, en el Teatro Avenida donde la orquesta y el Ensamble contaron –como solistas- con Marta Rossi, Florencia Burgard y Ricardo González Dorrego, interpretando obras de Licinio Réfice y Ottorino Respighi.
“Ahora estamos programando llevar el espectáculo de Morricone a Brasil. Y también, proyectamos misas del Renacimiento en nuestra ciudad. La música sirve para escucharnos, para entender, liberar y olvidar, para conectar el alma. Ese es nuestro mensaje”, agregan.