BBVA, en un último esfuerzo para lograr convencer a la mayor cantidad de accionistas rezagados de Banco Sabadell, ha alargado el horario de atención de 60 oficinas en toda España. Las sucursales de la entidad vizcaína han permanecido abiertas hasta las nueve de la noche, con el fin de que aquellos accionistas de Sabadell que no hubieran acudido a la opa aún tuvieran un lugar físico donde canjear sus títulos, así como para acceder a información relativa al proceso, que se alarga ya 17 meses.
Según relatan a EL PERIÓDICO fuentes de la entidad presidida por Carlos Torres, respecto a la decisión de ampliar el horario, la entidad asegura que “se trata de una ampliación excepcional del horario de atención al público, que los empleados están realizando de forma totalmente voluntaria y puntual”. En lo que concierne a la retribución por estas horas, el banco asegura que esta “se realiza conforme a lo establecido en el convenio colectivo de aplicación y la normativa vigente”.
Redactores de EL PERIÓDICO han pasado durante este viernes por varias de las sucursales de BBVA con el horario extraordinario. El resultado ha sido claro: no han sido muchos los accionistas que físicamente han acudido a canjear sus acciones en la última jornada del plazo decretado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El ambiente ha sido tranquilo durante todo el día.
Poco movimiento en Sabadell
En la ciudad vallesana que alberga la sede histórica del Banco Sabadell, a apenas 140 metros de distancia, la jornada transcurrió con calma en la oficina del BBVA. Fueron pocos los clientes del banco catalán que se han acercado a canjear sus acciones. En el interior, el movimiento ha sido escaso. “No podemos comunicar mucho”, se disculpa uno de los trabajadores, que explica que su turno de tarde comenzó poco después de las tres y que la oficina permanecería abierta hasta las nueve de la noche “exclusivamente para el canje de acciones o resolver preguntas relacionadas”.
Afirmó, eso sí, que la mayoría de gente está optando por el servicio telefónico de asistencia habilitado para resolver dudas o realizar gestiones sin necesidad de acudir presencialmente. Por ello, fuera, la actividad apenas rompe la rutina del barrio. La escasa afluencia contrasta con la relevancia de la jornada, en la que se cierra el proceso de aceptación de la oferta que marcará el futuro inmediato del sector bancario.
Según detalló uno de los trabajadores, a la hora del canje, la gestión varía en función de si el cliente es o no depositante del BBVA. “Los primeros pueden realizar el trámite desde la aplicación del banco o aquí, en la oficina, mientras que los segundos deben acudir a su entidad o gestionarlo a través de la oficina mediadora”, afirmaba.
Varias opciones para el canje
Porque tal y como el folleto explicativo de la oferta establece, si un accionista decide aceptar, podrá hacerlo de varias formas. Una es presentar, con ayuda de un gestor, la declaración de aceptación en cualquier oficina de BBVA o a través de los teléfonos habilitados. La otra opción es enviar por escrito su declaración de aceptación donde tengan depositadas sus acciones de Banco Sabadell, ya sea de forma presencial, por medios electrónicos o por cualquier otro medio admitido por las entidades depositarias.
En la oficina localizada en el cruce entre las calles madrileñas de Goya y Velázquez, durante un tramo de la tarde solo acudieron dos clientes. Uno de ellos tenía un problema con su cartilla, y el otro no quiso responder a las preguntas de EL PERIÓDICO. Al preguntar a los empleados de la oficina, estos afirmaron que no podían hacer declaraciones, ni siquiera respecto a la cantidad de clientes que acudieron durante el día a canjear sus títulos.
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