La localidad toledana de Méntrida atraviesa horas de “calma tensa” a la espera de ver cómo evoluciona el incendio forestal declarado este jueves y que afecta a la provincia de Toledo y a la Comunidad de Madrid, que se encuentra ya perimetrado al 95%.
Según ha explicado en declaraciones a EFE el alcalde de Méntrida, Alfonso Arriero, el casco urbano de la localidad no ha resultado afectado porque durante la jornada del jueves el viento sopló en dirección contraria y alejó el humo del pueblo en dirección a la Comunidad de Madrid y a la propia capital española.
En este sentido, ha mostrado su preocupación por la evolución del incendio a lo largo de este viernes, ya que ha estado “muy cerquita” del monte de utilidad pública de la ‘Dehesa Berciana’, un paraje de 1.500 hectáreas al que los vecinos de Méntrida tienen “muchísimo cariño”, aunque la actuación de los medios de extinción y el viento han evitado que el fuego entrase en él.
Ha explicado que la mayor afección ha sido las parcelas agrícolas y la zona de monte bajo que se ha quemado, así como algunos comercios o viviendas que han podido resultar perjudicados, pero en todo caso alejados del casco urbano.
Arriero ha trasladado un mensaje de tranquilidad a sus vecinos porque el fuego está “perimetrado y evoluciona favorablemente”, a la vez que ha agradecido la actuación de todos los medios implicados en la extinción, como Protección civil, bomberos, Guardia Civil, la Unidad Militar de Emergencias (UME) y “hasta agricultores de Méntrida que nos han ayudado a hacer cortafuegos”.
En todo caso, el regidor ha indicado que se están controlando con drones las zonas de calor, para evitar que el fuego salga de la zona perimetrada especialmente a “mediodía, cuando el viento empieza a soplar más fuerte y puede provocar nuevos conatos”.