La localidad de El Bolsón, en el sudoeste de Río Negro, Argentina, se enfrenta a una situación crítica debido a los incendios forestales que se han descontrolado y avanzan hacia el casco urbano, mientas las autoridades emitieron nuevas órdenes de evacuación para proteger a los residentes ante la amenaza inminente de las llamas.
El intendente Bruno Pogliano describió la situación como de “caos total” y detalló que la evacuación gradual y ordenada se está llevando a cabo en áreas como Las Perlas del Azul, desde Paraíso y Hue Nain hacia el norte, Dulcería, Cascada Escondida, Loma del Medio, Doña Rosa, Camping Los Alerces, Campo Base y Camping del Río Azul hasta el Paralelo.
Se estima que la zona bajo amenaza comprende unas 700 viviendas.
En tanto, el Área Protegida Río Azul-Lago Escondido ha sido cerrada hasta nuevo aviso, y el acceso a la red de refugios está prohibido.
El incendio en El Bolsón
El incendio se desató hace más de una semana y recrudeció debido a una combinación de factores climáticos adversos.
Las altas temperaturas, que alcanzaron los 29 grados, se sumaron a un cambio en el viento, con ráfagas de entre 42 y 50 km/h, llegando hasta los 87 km/h. El viento y el humo dificultan el trabajo de los brigadistas.
El municipio instó a los 24 mil habitantes de El Bolsón a mantener la calma y seguir los canales de información oficiales, mientras habilitó al Polideportivo Municipal para albergar a los vecinos evacuados.
Hasta el momento, más de 3 mil hectáreas han sido afectadas por el fuego y se espera que brigadistas de Bariloche se sumen a las tareas de control y se refuercen los controles en el ingreso de Mallín.
Aunque se espera que el viento continúe durante este sábado, con ráfagas de entre 42 y 50 km/h, se pronostica una posible lluvia para el lunes, lo que podría ayudar a controlar la situación.
El gobernador Alberto Weretilneck sostiene que hay fuertes indicios de que los incendios fueron intencionales. Tres sospechosos fueron detenidos, y uno de ellos ya tiene prisión preventiva por 30 días.
El fuego ya se cobró una víctima: Don Ángel Reyes, de 87 años, quien falleció al negarse a evacuar su casa.
En tanto, el Gobierno nacional enviará $5.000 millones para ayudar a mitigar los daños.
Hasta el jueves, los incendios en la Patagonia habían consumido 25.300 hectáreas.