El sábado 14 de septiembre, una pareja que recorría Pampa de Achala entre la ruta 14 vieja y la Quebrada de Batán se topó con una escena impactante: una oveja utilizada como señuelo vivo en una jaula para atrapar pumas. Frente a la jaula, una trampa prohibida diseñada para desgarrar las patas del animal que la pise. El video grabado por los caminantes capturó el momento en que fueron atraídos por el llanto desesperado del cordero atrapado.
Gustavo Martínez, quien estaba acompañado por su compañera, relató en primera persona lo ocurrido al medio Sala de Prensa Ambiental. “Salimos a entrenar a las Altas Cumbres y, cuando bajábamos por La Pampilla, escuchamos el llanto de un cordero. Seguimos el sonido y nos encontramos con la trampa. Decidimos activarla para que se cerrara, porque era un peligro, y al ver al cordero en la jaula, le dimos agua y lo liberamos. No sabemos cuántos días llevaba allí, pero estaba bajo el sol y sin agua.”
Martínez también comentó que los materiales de la jaula estaban en un estado que indicaba que la práctica de usar trampas ilegales en la zona podría ser recurrente.
El hallazgo ha generado indignación y preocupación por el uso de estos métodos crueles de épocas en que el hombre no tenía ningún aprecio por los seres vivos autóctonos de nuestra región y con el agravamiento de estar dentro de un área natural protegida.