Los uniformados, a la hora de inspeccionar el vehículo, percibieron que el conductor llevaba dos cajas de grandes dimensiones y luego de la revisión constataron que había 22 astas de ciervos de diferentes tamaños.
El conductor manifestó que carecía del aval legal para transportar estos objetos que finalmente fueron decomisados y quedaron a disposición de la Fuerza de Seguridad de Bell Ville.