Gavi acaba el 2025 esperanzado y con muchas ganas de afrontar el 2026. El jugador del FC Barcelona echa la mirada atrás a los tiempos más duros con naturalidad y se le ilumina una sonrisa cuando piensa en volver a los terrenos de juego.
El futbolista aún no se puede calzar las botas y se ejercita a diario en la Ciudad Deportiva con enorme intensidad. Para Gavi no hay días festivos. Un domingo de diciembre libre para la plantilla fue de trabajo para el de Los Palacios. No hay prisas, pero tampoco tiempo que perder.
Gavi atendió a SPORT con simpatía y descorchó una botella de cava con la alegría propia de quien piensa que lo mejor está por llegar. El jugador brindó por un feliz 2026 para nuestros lectores, agarrando la copa en una mano y en la otra con el balón que tanto ama. Su herramienta de trabajo y su gran pasión.
Gavi descorcha una botella de cava para SPORT / Gorka Urresola
El futbolista fue intervenido a finales de septiembre y se estimó un plazo de recuperación de entre cuatro y cinco meses. En esta segunda lesión se optó por suturar el menisco interno de la rodilla derecha, pensando en que es la mejor opción pare su futuro, aunque ello lo llevará a estar más tiempo apartado de los terrenos de juego.
El primer impacto ha quedado atrás y ahora afirma que “voy muy bien, sigo los plazos acordados y espero seguir así. Ojalá estar ya mismo sobre el verde”. Gavi se perderá la Supercopa de España, no podrá ser otra vez el azote para el Real Madrid en caso de llegar a la final, pero a mediados de febrero ya podría estar con el resto de compañeros.
Alma azulgrana
Su espíritu guerrero le está empujando a tirar hacia adelante durante estos meses, pese a a admitir que “echo mucho de menos el balón, estar con la pelota y jugar con tus compañeros”.
Esta temporada solo participó en dos partidos hasta que tuvo que ser intervenido, pero en la anterior tuvo un rol importante en la conquista de los tres títulos: La Liga, Supercopa de España y Copa del Rey.
Gavi participó en 42 partidos, marcando 3 goles y repartiendo 3 asistencias. Hansi Flick le mostró un especial aprecio tanto en el aspecto anímico como en el futbolístico. Jugó tanto de interior, su posición más natural, como de medio centro. Gavi siempre respondió, aunque no fuera titular en todos los partidos.
El andaluz hace un balance positivo del anterior ejercicio en el que considera que “fue bastante bien para mí y el equipo”. La mejor noticia, sin duda, es que “ha pasado la lesión, pero es fútbol, la vida, toca trabajar para recuperarte, pero estoy feliz por este año porque hemos ganado tres títulos muy importantes, estoy seguro que volveré a ser el de siempre”.
Gavi está muy ilusionado con el 2026 / Gorka Urresola
Gavi es un ídolo para la afición por su tesón y calidad. Se pudo a los culés en el bolsillo desde su debut en la Champions League ante el Bayern de Múnich de la mano de Ronald Koeman cuando no le tembló el pulso al entrar en un equipo en depresión y que necesitaba el espíritu de un futbolista que dejó a los barcelonistas con la boca abierta.
Nunca se ha arrugado y asegura “la gente podrá ver al Gavi que espera, tengo eso en la cabeza y tengo la mentalidad, que me hace fuerte para conseguirlo“. El jugador reconoce que “no sé cuando volveré de la lesión, pero cuando lo haga será al cien por cien”. Un afirmación que hace con rotundidad y convencido de que todo va por el buen camino.
Motivado ante el Madrid
El Madrid volverá a ser el gran rival a batir. Gavi es un jugador que se crece ante los blancos y le gusta afrontar “esta rivalidad que tenemos aquí en España”. A la hora de analizar los duelos con el eterno rival, el barcelonista recuerda como “el año pasado demostramos de lo que somos capaces” y que en la actual “estamos haciendo un temporadón y lucharemos por las cosas importantes“.
Si una cosa tiene este vestuario, con futbolistas del alma de Gavi, es que “no vamos a relajarnos, seguiremos con la mentalidad que tenemos”. Una fortaleza que ha llevado este Barça de Flick a hacer de nuevo soñar a los culés.
